Una ceremonia significativamente fraterna, fue la que se desarrollo en dependencias del centro de atención y formación de niños en edad pre-escolar, antes indicado, con el propósito de dar por inaugurado un nuevo espacio de recreación.

La actividad se inserta dentro de una de las etapas finales del plan de trabajo solidario, que integrantes del Colegio Nuestra Señora de Andacollo han desarrollado desde 2013 (profesores Yoel Álvares e Ignacio Cáceres), con la intención de mejorar la calidad de vida y dignificar la formación de los menores que son parte de la comunidad.

Durante este tiempo se han desarrollado diversas gestiones, para que este espacio de servicio integral, sea mejorado continuamente, y además, quienes en él se desempeñan como profesionales puedan replicar ésta modalidad de servicio solidario con otras instituciones que se ubican en zonas próximas y que igualmente requieren ayuda.

Es así como gracias al trabajo colaborativo de miembros de la fiscalía regional , estudiantes y profesores de Construcciones Metálicas, Voluntarios de Gesta Sede Norte y el apoyo permanente de Rectoría, el jardín Capullitos del Llano recibe con nuevos espacios a sus integrantes permitiéndoles contar con lugares más acogedores y seguros.

Para quienes son las encargadas de recibir y guiar el proceso de aprendizaje de cada niño y niña, las educadoras Rosa Pallero y Gema Muñoz, este trabajo solidario conjunto “nos ha enseñado que el concepto solidaridad, vale mucho, pues nos permitió entender que muchas veces al ayudar , nos ayudamos nosotros mismos… a nosotros nos enseñaron con el ejemplo a ayudar, ahora, nosotros lo hacemos, convencidos de que es posible salir adelante aportando y valorando a los demás… damos gracias por cada esfuerzo y apoyo que nos permitió vivir esta experiencia”.

En el carisma de Champagnat compartimos imágenes de la actividad.